La Justicia acelera la investigación por presuntas coimas y ya comenzó a extraer datos de los teléfonos
Los dispositivos pertenecen a funcionarios y empresarios mencionados en los audios que aluden a supuestos sobornos en la ANDIS. La Justicia ya inició el análisis del contenido.
La Justicia federal puso en marcha la apertura y análisis de los teléfonos celulares secuestrados durante los allanamientos realizados el viernes, en el marco de la investigación por presuntos pagos de coimas en la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis).
Entre los dispositivos incautados, figuran dos teléfonos pertenecientes a Diego Spagnuolo, extitular de Andis, quien fue localizado por la policía en su domicilio de Pilar. En el operativo, se le secuestraron además documentación, una máquina de contar billetes y su camioneta Volkswagen Nivus, justo cuando se disponía a salir del barrio cerrado Altos de Campo Grande.
También fue allanada la vivienda de Daniel María Garbellini, exdirector de Acceso a los Servicios de Salud de la agencia. Su teléfono ya fue enviado para su análisis forense.
Otro de los señalados es el empresario Emmanuel Kovalivker, directivo de la droguería Suizo Argentina, quien también habría entregado su dispositivo móvil. El fiscal federal Franco Picardi, a cargo del expediente, investiga una presunta red de sobornos vinculada a licitaciones o compras direccionadas dentro del área que estaba bajo la órbita de Spagnuolo.
El ritmo acelerado de los procedimientos judiciales revela la intención de imprimirle celeridad a la causa, que ya generó fuerte repercusión dentro del Gobierno nacional. Desde la Casa Rosada, algunos sectores insisten en que se trata de una operación política para perjudicar al oficialismo de cara al proceso electoral.
Los celulares, junto con los documentos y expedientes incautados, serán examinados para determinar si existe evidencia que confirme arreglos irregulares en contrataciones públicas.
Para esto, se está llevando adelante una extracción forense de los teléfonos: una técnica que permite recuperar con rapidez el contenido de los dispositivos para su análisis como posible prueba judicial. El procedimiento lo realiza la Dirección General de Investigaciones y Apoyo Tecnológico a la Investigación Penal (DATIP).
Según fuentes judiciales, ya se comenzaron a descargar mensajes de algunos equipos. El foco está puesto en los audios que dieron origen a la causa, en los cuales una voz, atribuida a Spagnuolo, haría alusión al cobro de sobornos y menciona de forma indirecta a Karina Milei, hermana del Presidente.
Hasta el momento, Spagnuolo no fue detenido ni citado a declarar, y su situación procesal aún no fue definida. No obstante, en el entorno judicial deslizaron una frase sugestiva:
“Pueden aparecer arrepentidos”.
Más que un anticipo procesal, la afirmación se interpretó como una señal hacia los involucrados para que colaboren con la investigación.
En paralelo, sigue la búsqueda de Jonathan Kovalivker, hermano del empresario Emmanuel, quien el viernes logró abandonar su domicilio antes de que la policía llegara. Al ingresar a la vivienda, los agentes hallaron una caja fuerte abierta y bandas elásticas tiradas en el suelo, un dato que alimenta las sospechas en torno a maniobras financieras sospechosas.