Este martes, la vicepresidenta Victoria Villarruel sorprendió a todos con su presencia en el Tedeum por el 9 de Julio, luego de haber alegado un cuadro gripal que le impidió asistir a la firma del Pacto de Mayo en Tucumán. A primera hora de la mañana, se la vio caminando del brazo del presidente Javier Milei hacia la Catedral Metropolitana en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

La ausencia de Villarruel en la firma del Pacto de Mayo había generado especulaciones, ya que se informó que su salud no le permitía viajar. Sin embargo, la vicepresidenta decidió acompañar al presidente en la ceremonia religiosa, contradiciendo las recomendaciones médicas.

La misa, a cargo del arzobispo García Cuerva, contó con la presencia de todos los miembros del Gabinete nacional. Tras la ceremonia, tanto Milei como Villarruel se dirigieron a la Avenida del Libertador, donde se montó un escenario principal para continuar con las celebraciones patrias.

La asistencia al Tedeum de la vicepresidente ha generado diversos comentarios y opiniones en el ámbito político, dado que su participación en el Tedeum fue vista como un gesto significativo, especialmente tras su ausencia en un evento clave como la firma del Pacto de Mayo.