En un escenario de creciente tensión política y dificultades económicas, Mauricio Macri reapareció en público para encabezar un acto de apoyo a los candidatos del PRO que competirán en las elecciones de octubre. La aparición se produjo en un contexto marcado por la ausencia de diálogo con Javier Milei y por la visible fractura interna en el espacio, con críticas abiertas de referentes como Cristian Ritondo y Silvia Lospennato.

Durante su intervención, Macri reconoció la complejidad del momento: “Estamos en un momento en el cual hay que ser muy prudentes, el Gobierno está enfrentando un desafío cambiario, pero tiene un equipo económico que entiende cómo sortear esta dificultad”, afirmó, en una línea que buscó transmitir calma y confianza en la capacidad de gestión del oficialismo para encarar la cuestión monetaria.

Consultado sobre la posibilidad de reunirse con Milei, el expresidente aseguró su disposición a dialogar: “Sí, hace más de un año que no hablamos ni lo veo, pero yo siempre estoy a disposición para ayudar a que este país encuentre el rumbo”. La frase remarca una apertura formal al encuentro, aun cuando la relación entre ambos no registra contactos recientes.

Macri también se refirió al respaldo internacional que Milei recibió del gobierno de Estados Unidos, calificando ese apoyo como “muy impresionante” y señalándolo como un factor que brinda “una tranquilidad para poder trabajar y empezar una nueva etapa”. Con esa lectura, el exmandatario interpreta el gesto internacional como un elemento de estabilidad que podría influir en el escenario político local.

La declaración pública busca, en lo inmediato, contener a la estructura partidaria del PRO y ofrecer una señal de unidad y normalidad ante la ciudadanía, mientras las tensiones internas y la relación con fuerzas externas siguen condicionando la agenda política hacia octubre.