Pablo Quirno reemplaza a Werthein como canciller: impacto en la política exterior
El presidente designó al secretario de Finanzas, allegado a Luis “Toto” Caputo, para ocupar el puesto vacante de Gerardo Werthein, mientras el gobierno aún debe definir al sucesor de Cúneo Libarona en el área de Justicia.
El presidente Javier Milei comenzó a delinear el nuevo gabinete que anunciaría, según fuentes oficiales, la semana próxima tras las elecciones nacionales. Para ocupar la vacante dejada en la Cancillería, el mandatario designó a Pablo Quirno, hombre de confianza del ministro de Economía Luis "Toto" Caputo y uno de los principales impulsores de la medida.
En el comunicado oficial de la Presidencia se informó que Gerardo Werthein presentó su renuncia a partir del lunes 27 de octubre y que en su reemplazo asumirá Pablo Quirno, actual secretario de Finanzas y miembro central del equipo económico que, según el gobierno, contribuyó a evitar lo que describen como la mayor crisis de la historia del país.
Quirno ya ocupa desde hace tiempo el cargo de secretario de Relaciones Económicas en la Cancillería y conduce las negociaciones con inversores internacionales. Su nombramiento al frente del Ministerio de Relaciones Exteriores podría potenciar esa tarea, integrando con mayor intensidad la agenda económica exterior con la política de gobierno.
El texto oficial subraya además que la designación busca profundizar el vínculo entre la Cancillería y el Ministerio de Economía y consolidar una visión promercado en la segunda etapa de la gestión presidencial.
Minutos después del anuncio, Quirno expresó su agradecimiento por la nominación: "Un honor asumir esta nueva responsabilidad, muchas gracias al presidente Milei por la confianza y al ministro Luis Caputo por tantos desafíos compartidos. ¡Seguiremos trabajando en equipo!", señaló.
Fuentes del entorno también destacan que Quirno mantiene una relación fluida con Santiago Caputo. En el ámbito público se ha visto su adhesión a ciertos emblemas y canales vinculados al oficialismo, elementos que contribuyen a su visibilidad dentro del espacio gubernamental.
La designación de Quirno al frente de la Cancillería implica, en lo inmediato, una mayor subordinación de la política exterior a la agenda económica del Ejecutivo y anticipa una continuidad en la estrategia de atracción de inversiones y manejo de relaciones financieras internacionales. El gobierno apuesta así a una coordinación más estrecha entre las carteras que manejan la política económica y la diplomacia comercial.