El primer corte nacional de la Cámara Nacional Electoral muestra que el 28% de los electores ya habían votado hasta las 12. De este modo, se superó la media de las PASO de 2021, cuando había sido del 25%.

Demoras, largas filas y quejas en la CABA por problemas con el sistema concurrente

Este domingo, los porteños están eligiendo sus candidatos para la Ciudad de Buenos Aires mediante el voto electrónico; y para la Nación, con el sistema tradicional de boleta papel. Apenas se abrieron las escuelas, comenzaron las quejas por las demoras del sistema concurrente: en algunos casos por fallas en las máquinas, otras por el desconocimiento de los votantes y también porque en muchos colegios no se permitía que una persona realizara la primera parte del circuito (el voto papel) mientras otra hacía la segunda (el digital). A esto se sumó la habitual complicación para completar las autoridades de mesa.

Durante la espera se generaban quejas y explicaciones improvisadas entre los propios votantes sobre cómo usar el sistema. Ya en las aulas, las autoridades explicaban desde la mesa a quienes miraban, desorientados, la máquina, pero no podían acercarse para hacer una demostración por temor a que el voto quedara anulado.

Las redes sociales fueron otro punto de descargo. “En el Bajo Flores aún muchos no pudimos votar. No funcionan las máquinas para el voto electrónico”, manifestó @marasinapellid1.

Otros optaron por alertar sobre los minutos de espera. “Voté en el Club Atlanta en la mesa de al lado mío no funcionaba la máquina. Un señor estuvo 40 min para votar”, denunció @unachicadicesi.

“En un centro de votación en Boedo NI SIQUIERA los atendieron cuando pidieron un técnico que solucione el problema. Se comenzó a votar solo por NACIÓN. ¡Hay que volver más tarde para ver si se puede votar por la Ciudad. I M P R E S E N T A B L E.” dijo @gringodeboedo.

Además, varios usuarios reportaron que, como suele suceder, en algunas escuelas las demoras iniciales se debieron a la falta de autoridades de mesa.

Figuras públicas como María O' Donnell tambien sufrieron las demoras y cuestionó que llevó un “rato largo al aire libre en una fila que casi no se mueve”. “No dejan entrar al centro de votación y llaman de a uno… no sé ustedes pero en mi mesa en CABA viene lento. Una hora mínimo”, manifestó vía Twitter.

“Dijeron que se iba a votar papel y máquina en simultáneo: puede fallar; el nivel de confusión de las autoridades de mesa y fiscales es elevado y genera muuucha demora. Resulta que la autoridad de mi mesa decidió que no acepta que dos personas voten en forma simultánea (una el papel, el otro la máquina): dice que no lo pueden controlar. No les puedo explicar el tiempo que demora cada voto. Ahora estimo hora y media mínimo”, agregó.

Incluso los propios candidatos han demorado en la fila de votación. Martin Lousteau ingresó a las 8.30 y logró sufragar a las 8.51. Por su parte, Leandro Santoro demoró media hora en una escuela del barrio de Boedo. “A pesar de que está demorando mucho, le pido por favor a la gente que venga a votar lo que quiera votar, pero que venga”, pidió.

Tucumán sin el caos que pudo verse en junio

En Tucumán el clima electoral se vive con calma. Esta vez, sin tanta efervescencia ni ansiedad dirigencial. En los comicios provinciales de 11 de junio, la apertura de las escuelas fue un caos, en la mayoría de los establecimientos de la capital. Las demoras por la ausencia de autoridades de mesa quedó en evidencia de las primeros minutos de la jornada electoral.

Hoy, la imagen que muestran los lugares de votación es diferente. En un ambiente de mayor orden, sin aglomeraciones de tucumanos que esperan por sufragar. Además, el inicio de la votación comenzó en horario en la mayoría de las escuelas. Tampoco se observan los cientos de vehículos identificados por los dirigentes y punteros políticos que suelen llevar votantes.