Uruguay: la Cámara de Diputados dio media sanción al proyecto que permite la eutanasia
En caso de promulgar la ley, Uruguay será el tercer país de América en legalizar la eutanasia, después de Colombia y Canadá.
La Cámara de Diputados de Uruguay aprobó el pasado martes un proyecto de ley que permite la eutanasia, el cual ahora deberá ser evaluado por el Senado. En caso de recibir el respaldo del Senado, Uruguay se convertiría en la tercera nación de América Latina en autorizar la muerte asistida. La aprobación se produjo tras una extensa sesión en el Parlamento de Montevideo, donde se obtuvieron 64 votos a favor y 29 en contra, cinco años después de iniciado el debate sobre la muerte asistida en el país, que cuenta con una población de aproximadamente 3.500.000 habitantes.
La iniciativa tiene como finalidad “regular y garantizar el derecho de las personas a transcurrir dignamente el proceso de morir, en las circunstancias que ellas determinen”, buscando ofrecer una muerte “indolora, apacible y respetuosa” a aquellos que lo deseen, siempre que se cumplan ciertas condiciones. En este contexto, el diputado Luis Enrique Gallo, del oficialista Frente Amplio y uno de los principales promotores de la propuesta, afirmó: “La muerte forma parte de la vida y es necesario hablar de ello, por eso consideramos la eutanasia como un ejercicio de derecho”.
Además, subrayó : “Cada uno tiene el mismo derecho a elegir su muerte que elegir su vida”. Entre las condiciones estipuladas en el proyecto, se establece que los pacientes que deseen optar por la eutanasia deben ser mayores de edad, estar psíquicamente aptos y encontrarse en la “etapa terminal de una patología incurable e irreversible” o padecer “sufrimientos que resulten insoportables”. Asimismo, el acceso a la eutanasia estaría limitado a ciudadanos uruguayos o a extranjeros con residencia fehaciente, y los solicitantes deberán contar con la aprobación de al menos dos profesionales de la salud.
Desde 2013, Uruguay ha contado con una normativa que permite a los pacientes terminales rechazar tratamientos médicos que prolonguen su vida, aunque la eutanasia y el suicidio asistido se consideran delitos de “homicidio piadoso”. La sesión del martes, que se extendió hasta las primeras horas del miércoles, fue marcada por la exposición de más de 40 legisladores antes de la votación. El proyecto será revisado por la Comisión de Salud del Senado, y si es aprobado, se enviará al pleno de la Cámara Alta, y posteriormente al Poder Ejecutivo para su promulgación.