Día Mundial del Riñón: qué alimentos ayudan a mantenerlos sanos
Estos órganos filtran toxinas, regulan el equilibrio de líquidos y ayudan a mantener la presión arterial estable. Cuidarlos es clave para prevenir enfermedades graves. La importancia de llevar una dieta adecuada y hábitos saludables
Los riñones desempeñan un papel clave en el organismo: filtran toxinas, eliminan el exceso de líquidos y regulan el equilibrio químico del cuerpo. Sin embargo, su función puede deteriorarse debido a factores como una alimentación inadecuada, la deshidratación, el sedentarismo o enfermedades como la diabetes y la hipertensión.
El cuidado de los riñones depende en gran medida de una dieta equilibrada y hábitos de vida saludables. De acuerdo con el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de Estados Unidos (NIDDK), mantenerse bien hidratado es fundamental para el correcto funcionamiento renal, ya que facilita la eliminación de desechos a través de la orina.
Asimismo, una alimentación rica en frutas, verduras y granos integrales, junto con la reducción del consumo de sodio y azúcares, puede ayudar a prevenir la enfermedad renal crónica.
Cuáles son los alimentos que ayudan a mantener sanos los riñones
La alimentación juega un papel crucial en la salud renal. A continuación, una lista de alimentos recomendados y sus beneficios:
- Arándanos: conocidos por sus propiedades antioxidantes, ayudan a reducir el riesgo de infecciones urinarias y contribuyen a mantener los riñones desintoxicados, según el sitio MedlinePlus, de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos
- Manzanas: ricas en fibra soluble y antioxidantes, favorecen la regulación del azúcar en sangre, lo que es clave para la prevención de enfermedades renales en personas con diabetes.
- Naranjas: la Fundación Española de la Nutrición recomienda esta fruta por su alto contenido en citratos, que ayuda a prevenir la formación de cálculos renales, además de ser una fuente de vitamina C con efectos antioxidantes.
- Ananá: rico en vitamina C, potasio y bromelina, contribuye a combatir infecciones e inflamaciones en los riñones.
- Frutillas: su alto contenido en antioxidantes previene el daño celular y favorece el buen funcionamiento renal.
- Cereales integrales: al ser ricos en fibra, facilitan la eliminación de toxinas del cuerpo, evitando que se acumulen en los riñones.
- Frutas y verduras ricas en potasio: banana, melocotón, papa, cebolla, apio, brócoli, coliflor y berenjena ayudan a aumentar la producción de orina y a mantener un equilibrio saludable de electrolitos.
- Pepino: gracias a su alto contenido de agua, ayuda a mantener una hidratación adecuada y favorece la eliminación de toxinas, contribuyendo al correcto funcionamiento renal, según MedlinePlus.
- Alimentos ricos en calcio: leche y derivados bajos en grasa, lechuga, brócoli, espárragos, col, calabaza, salmón y sardina fortalecen los riñones y favorecen su buen funcionamiento.
Por otro lado, es recomendable evitar el consumo excesivo de sal, lácteos enteros, alimentos altamente procesados, edulcorantes artificiales, cafeína y alcohol, ya que pueden favorecer la aparición de cálculos renales y otros problemas renales.
Los riñones cumplen una función vital en el organismo, pero muchas veces no reciben la atención necesaria hasta que aparece una enfermedad. El Día Mundial del Riñón nos recuerda la importancia de adoptar hábitos saludables para prevenir enfermedades renales, como una dieta equilibrada, una hidratación adecuada, la práctica de ejercicio y controles médicos regulares.
Pequeños cambios en la rutina pueden marcar una gran diferencia en la salud renal y general. La prevención es la mejor estrategia para mantener nuestros riñones en óptimas condiciones y mejorar nuestra calidad de vida.