Viaje de egresados: fue a Bariloche con síntomas de coronavirus y contagió a 65 compañeros
Los alumnos son de Buenos Aires. La estudiante no cumplió con los requisitos y, pese a que sufría dolor de garganta, fue igual.
Una alumna de un colegio de Castelar, en Buenos Aires, ocultó síntomas de coronavirus y finalmente decidió viajar a la ciudad de Bariloche con el curso, con lo que 65 de los 75 chicos terminaron infectados, publicó el diario Clarín.
Con un año de anticipación, un grupo de 75 alumnos del Colegio Sagrado Corazón de Castelar había empezado a pagar en 18 cuotas el viaje a San Carlos de Bariloche. Contrataron el paquete de la empresa Travel Rock para instalarse durante 10 días en el hotel Ausonia, tras recorrer 1.600 kilómetros en un vuelo de Aerolíneas Argentinas que partió de Aeroparque a las 16.
“Una de las chicas fue la que llevó el virus. Se realizó el PCR (con resultado negativo) el lunes, dos días antes de lo que exigía la empresa. En el aeropuerto firmó la declaración jurada obligatoria para confirmar que no tenía ningún síntoma”, dijo a Clarín una de sus compañeras.
El grupo de egresados señala que ocultó el dolor de garganta, que ya sentía desde el jueves, y algunas líneas de fiebre con paños fríos, ibuprofeno y paracetamol. También, que después de haberse hisopado mantuvo contacto estrecho con el hermano y el novio, que se contagiaron. “Viajó con el virus”, señalan indignados por las consecuencias que desató el hecho.
A la comitiva le resultó llamativa la cantidad de horas que dormía, durante el viaje y los primeros días desde el arribo. “Estaba ojerosa y muy cansada. Recién avisó que se sentía mal dos días después de haber llegado. Ya habían pasado dos noches en las que participó de las excursiones y fue a bailar a los boliches. Al tercer día del viaje empezaron a caer varios chicos con covid”, relata un compañero. Por el momento, no se radicó ninguna denuncia.
El medio porteño se contactó con la empresa a cargo del viaje, que confirmó que para los casos que requirieron aislamiento se puso un hotel entero a disposición para implementar el protocolo. Aislamos no solo a positivos, también a los contactos estrechos. No se emitió un comunicado general, sino que notificaron a cada padre en particular. “En todos los casos, se chequeó que el PCR se hubiera realizado con 72 horas de anticipación, además de las 5 declaraciones juradas que se les hizo firmar. Además, los hisopados no sólo son chequeados por la empresa; también por la asistencia médica y la autoridad competente”, afirma la entidad.
Cadena de contagios
Al tercer día, empezaron a ser registrados casos de Covid. La sintomatología era leve, pero no evitaba que varios de los chicos la pasaran mal. Por lo general, sentían cansancio corporal extremo, como si una aplanadora les hubiera pasado por encima. Además, algunos tenían fiebre y sufrían la pérdida de olfato y de gusto.
El hotel se organizó con una burbuja de 300 personas, que unía a varios colegios, entre los cuales había algunos de Ramos Mejía. Se aislaron en sus habitaciones (un máximo de 5 personas) para evitar cualquier clase de contacto. “La empresa se encargó de que nos trajeran la comida al cuarto. Estuve tres días de cama sin poder levantarme. Me voy a hacer los chequeos en cuanto pueda”, contó una de las egresadas.
Del grupo de 75 jóvenes, se contagiaron 65: 35 de ellos presentaron síntomas en Bariloche, por lo cual debieron cumplir con el aislamiento de 10 días. A los asintomáticos les adelantaron la fecha de la vuelta, pactada para que el viernes 9 pudieran trasladarse, en un vuelo especial, al Aeroparque Newbery.
En Buenos Aires había puestos del Gobierno porteño esperando a la comitiva para que todos se sometieran otra vez un test de antígenos. La primera sorpresa fue que, salvo 10, el resto arrojó resultado positivo. La segunda, el cuadro de una de las egresadas, que no había presentado síntomas, a los 5 días se complejizó por una neumonía. “Me partió en dos”, señal cuando fue internada. A los días recibió el alta médica.