España: alerta el desabastecimiento por paro de transporte
La protesta de los transportistas amenaza con enquistarse. Los paros arrancaron el pasado 14 de marzo en reclamo por subsidios y garantías laborales.
El paro de los transportistas en las principales regiones de España sigue creando problemas a las grandes empresas alimentarias y dificultando la cadena de suministro hasta el punto de que se ha convertido ya en un "problema de estado" que requiere de "una intervención urgente" por parte del Gobierno de Pedro Sánchez , pues está dificultando una actividad tan esencial como es el suministro de alimentos, y obligando a paralizar las fábricas. Esto es algo que no ocurrió ni siquiera durante el confinamiento, ya que al tratarse de un servicio esencial, siempre se garantizó la actividad y transporte de estos productos.
Por ello, las principales asociaciones que integran a la cadena de valor agroalimentaria y del gran consumo, desde el sector primario hasta la distribución, han exigido al Gobierno este martes "una intervención urgente" ante la gravedad de la situación. Desde hace ya nueve días el paro está bloqueando el transporte de materias primas necesarias para la elaboración de productos a las respectivas fábricas, por un lado, y el de los frescos y productos ya terminados a tiendas, mercados y hostelería, por otro. Hay flotas paradas y ya hay escasez de determinados productos en algunos supermercados e incluso en la hostelería, mientras los fabricantes de alimentación hacen un esfuerzo ímprobo para mantener la actividad a pesar de las dificultades.
Por eso, y ante la falta de una solución, la cadena de valor agroalimentaria y del gran consumo considera "inaplazable poner fin a esta situación que está poniendo en claro riesgo el abastecimiento de productos, así como la continuidad de miles de negocios y empleos", señalan en un comunicado conjunto asociaciones como Aecoc, Aces, Anged, Aedas, Cooperativas Agro-Alimentarias y Fiab.
El Gobierno ofreció ayer una solución a los transportistas que no les ha convencido. La Plataforma convocante de las protestas continúa con las movilizaciones e incluso algunas organizaciones que no secundaban el paro, se han sumado ahora a él. Las empresas de la cadena denuncian desde hace días el boicot a muchos profesionales que no se han sumado al paro.
El conflicto está golpeando a un sector, el agroalimentario, que también está muy afectado por la subida de costes (energía, materias primas y transporte) y que, además, cumple una función vital para la economía y para la sociedad. Por ese carácter esencial este paro es muy diferente a otros que han puesto a los gobiernos de turno contra las cuerdas, como el de controladores aéreos en 2020, que obligó a declarar el estado de alarma y movilizar al ejército.
También recuerda al movimiento de los chalecos amarillos, que comenzó en Francia también como protesta por el alza de los combustibles y acabó con fuertes protestas que llegaron a paralizar el país . "La situación ya es, en estos momentos, insostenible", instan en su comunicado las citadas asociaciones, que han pedido al Gobierno de España "una intervención urgente en un conflicto que se ha convertido en un problema de Estado con un impacto sobre la economía y los ciudadanos que no admite demora".
Danone amenaza con el paro en todo el país
Hay empresas que ya han tenido que parar su actividad y otras, como Danone, que lo hará en las próximas horas si no se alcanza una solución. La empresa ha anunciado que parará sus cuatro plantas de lácteos en España si continúa el problema. Nestlé o Lactalis también han advertido que están en una situación límite, al igual que cerveceras como Heineken o Mahou, que reportan serios problemas para suministrar productos a las superficies comerciales, bares y restaurantes.
"De no llegar a un acuerdo en las próximas horas, Danone se verá obligada a tomar la drástica decisión de interrumpir el proceso de recogida de leche, y como consecuencia, el proceso de producción en sus fábricas y posterior traslado de producto terminado a las cadenas de distribución alimentaria", dice la compañía en un comunicado.
Casi todas tienen problemas para el aprovisionamiento de materias primas esenciales para elaboración de los productos. Como explica el consejero delegado de Lactalis en España, Ignacio Elola, "a las plantas de leche no están llegando plásticos, papel, cartón, palés o ingredientes para elaborar y envasar este alimento esencial y se acumula el producto terminado mientras la caducidad corre al tratarse de un producto perecedero".