Perro héroe salvó a un esquiador sepultado por una avalancha

Un alud de nieve pudo haber sido la fría tumba de un deportista que fue sorprendido por el desprendimiento, quedando virtualmente sepultado bajo una gruesa capa, algo que le habría costado la vida de no ser por el instinto y el entrenamiento de un noble animal.

El joven esquiador quedó enterrado bajo un metro y medio de nieve a raíz de la avalancha cerca de la ciudad de Ushuaia, pero pudo ser rescatado este sábado por la noche gracias a “Tango“, un perro preparado para este tipo de siniestros, que marcó el lugar exacto donde se encontraba la víctima y posibilitó que lo encontraran con vida.

Perro héroe: Así comenzó el drama

La avalancha se produjo pasadas las 20.30 en la zona del Glaciar Martial, ubicado en la parte alta de la capital fueguina. Fue cuando un gran desprendimiento de nieve se deslizó montaña abajo y sorprendió a dos jóvenes que practicaban esquí de travesía.

Uno de los deportistas logró eludir la avalancha, pero sufrió golpes en una rodilla al trabarse el esquí contra unas rocas. Su compañero no corrió la misma suerte, por lo que quedó sepultado por la nieve.  

Tras el pedido de ayuda, integrantes de la Comisión de Auxilio de Ushuaia activaron el protocolo de rescate y se dispuso un operativo de búsqueda con base en la parte inferior del glaciar.

Una búsqueda muy dificultosa por la poca luz que había: era totalmente de noche. 

Perro héroe: Uno de los primeros en llegar

Uno de los primeros rescatistas en acudir al llamado de emergencia fue el cabo primero del Cuartel de Bomberos 2 de abril, Julián Elizari, quien se hizo presente acompañado de su perro “Tango”, acudieron al rescate.

Tango, es un perro labrador de 10 años que fue entrenado para la búsqueda de personas para casos de avalanchas o estructuras colapsadas.

Los rescatistas lograron llegar al glaciar casi hora y media después de la avalancha, alrededor de las 22.

Subieron un segmento de la montaña en motos de nieve y luego comenzaron una carrera a pie, hundiéndose hasta la cintura para poder llegar al lugar donde se había provocado el siniestro.

Perro héroe: Así fue el rescate

“Luego de que el muchacho que pidió ayuda marcara donde estaban en el momento del desprendimiento, Tango empezó a hacer su trabajo: recorrió entre 10 metros y 15 metros a la redonda hasta que empezó a ladrar y a rascar la nieve. Lo había encontrado”, narró el bombero. 

El rescatista de 57 años continuó: “Empezamos a escarbar con cuidado, con palas y con las manos. La nieve estaba muy compacta y húmeda. Encontramos una mano, pero estaba quieta y temimos lo peor”, recordó.

El cuerpo del joven esquiador había quedado un metro y medio debajo de la nieve.

Elizari afirmó que “no sabe como sobrevivió” ya que permaneció más de una hora enterrado y sin burbuja de aire. Además del peso de la nieve que debió soportar. 

Perro héroe: por fin a salvo

Los brigadistas iniciaron el descenso de la montaña con el joven rescatado en camilla. Y más allá de la medianoche llegaron a la base del glaciar donde los aguardaba una ambulancia para trasladarlo a un centro asistencial.

Cerca de las 2, un parte emitido por personal médico del Hospital Regional Ushuaia reveló que el joven “se recupera y se encuentra estable, con parámetros normales e internado en observación”, según anunció la Comisión de Auxilio través de un comunicado.

“Para el perro es un juego. Todo lo que hace en un caso como el de anoche es para jugar con vos. Pero imaginen la importancia de su tarea. Ayer Tango salvó una vida. Ni más ni menos que eso”, le explicó Elizari a la agencia de noticias Télam.