El papa Francisco visitó Venecia y advirtió que la ciudad podría dejar de existir por el impacto del cambio climático

El Papa cumplió intensa agenda donde viajó a Venecia para visitar durante apenas cinco horas esta ciudad y el pabellón de la Santa Sede en su 60ª Bienal de Arte, convirtiéndose en el primer pontífice en visitar esta cita.
domingo 28 de abril de 2024

El Papa Francisco presidió este domingo una misa ante 10.000 fieles en Venecia donde alertó que con el cambio climático la ciudad podría dejar de existir y pidió por una gestión del turismo sostenible, en su primer viaje en siete meses debido a su delicado estado de salud. En esa línea, advirtió: "Venecia está unida a las aguas sobre las que se asienta y, sin el cuidado y la protección de este entorno natural, podría incluso dejar de existir".

A bordo de una embarcación que navegó por el Gran Canal en lancha, Francisco viajó a Venecia para visitar durante apenas cinco horas esta ciudad y el pabellón de la Santa Sede en su 60º Bienal de Arte, convirtiéndose en el primer pontífice en asistir a esta cita. 

"Si hoy miramos a esta ciudad de Venecia, admiramos su encantadora belleza, pero también estamos preocupados por los muchos problemas que la amenazan", manifestó ante los cerca de 10.500 fieles que acudieron a la misa.

Así, nombró el cambio climático como una amenaza porque "impacta en las aguas de la laguna" sobre las que se erige o "la fragilidad de las construcciones y sus bienes culturales" y patrimonio. Por eso, pidió que Venecia sea "un signo de belleza accesible a todos, una tierra que hace hermanos". En ese contexto, también denunció "la dificultad de crear un ambiente a medida del hombre a través de una adecuada gestión del turismo".

La visita del Papa coincide con la reciente entrada en vigor en Venecia de una tasa de entrada de 5 euros (5,35 dólares) para los turistas que visiten la ciudad por un día, con el objetivo de proteger a esta localidad patrimonio de la Unesco.

 

A pesar de sus 87 años, el Papa mostró un buen semblante mientras llevaba a cabo una agenda muy ocupada, demostrando una notable recuperación después de sufrir un episodio de fatiga durante la Semana Santa, lo que había generado preocupación.

Para el Papa, la cárcel "puede convertirse en un lugar de renacimiento"

En la mañana el papa aterrizó directamente en un helicóptero en el patio de una cárcel para mujeres situada en la isla de la Giudecca. La prisión alberga una exposición de obras de arte promovida por el Vaticano, en el marco de la 60ª Bienal de Arte Contemporáneo de Venecia.

Francisco se tomó el tiempo de saludar personalmente a cada una de las aproximadamente 80 reclusas, así como al personal administrativo y penitenciario, junto con los voluntarios. Chiara Parisi, comisaria de la exposición, destacó "el asombro" y "la esperanza" de las condenadas por esta visita.

En este antiguo convento para mujeres, convertido ahora en una prisión para reclusas con largas condenas, el papa afirmó que "la cárcel es una dura realidad, y problemas como el hacinamiento, la falta de instalaciones y recursos, y los incidentes violentos generan mucho sufrimiento". Pero destacó que la prisión, "también puede convertirse en un lugar de renacimiento".

"¡Ánimo, y adelante! No se rindan", dijo el pontífice tras recibir regalos elaborados por las presas.

Asimismo, Jorge Bergoglio habló con los artistas que participaron en la exposición, reunidos en la prisión, y destacó el papel del arte en la lucha contra "el racismo, la xenofobia, la desigualdad y el desequilibrio ecológico".

La agenda del Papa Francisco 

Antes de la misa, Francisco pronunció un discurso ante un grupo de 1.500 jóvenes ante la emblemática basílica de Santa Maria della Salute de Venecia, cuya majestuosa cúpula domina la entrada del Gran Canal. "¡Dejen de lado sus teléfonos móviles y vayan al encuentro de la gente!", pidió el papa.

Maela Pellizzato, una veneciana de 64 años que acudió a la plaza San Marcos para rezar "por la paz en el mundo", afirmó que la visita es "un momento fundamental" para la ciudad.

Después de un momento de recogimiento en la basílica de San Marcos, el pontífice retornó al Vaticano.

Cabe señalar que Francisco es el cuarto papa que visita la Ciudad de los Dogos, tras Pablo VI (1972), Juan Pablo II (1985) y Benedicto XVI (2011). Su historia está estrechamente ligada a la del papado. En el siglo XX, tres patriarcas de Venecia llegaron a ser papas.

Tras este viaje, el Papa Francisco tiene previsto realizar otros dos al norte de Italia, a Verona en mayo y a Trieste en julio.

El Papa no viajaba desde su visita a Marsella, en el sur de Francia, en septiembre de 2023. Una bronquitis le obligó a cancelar su viaje a Dubái en diciembre por su estado de salud, cada vez más frágil.

Aunque esto no impidió al Vaticano anunciar una ambiciosa gira papal a los confines de Asia y Oceanía en septiembre, el viaje más largo del pontificado de Jorge Bergoglio, que se presenta como un ambicioso reto pastoral y físico.Perfil